Dígale adiós a la flacidez de los brazos.
El “murciélago” como popularmente se le conoce al exceso de piel o flacidez debajo del brazo, puede ser una verdadera tortura, sobre todo para las mujeres que habitualmente utilizan blusas y ropa sencilla.
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Antes se creía que con el paso del tiempo las mujeres adultas eran las que más sufrían de brazos flácidos, pero lo cierto es que esto puede ocurrir a cualquier edad, y más cuando hay sobre peso, o una descompensación de kilos importante.
Lo primero que debe tener en cuenta, es que si usted tiene exceso de grasa en todo el cuerpo, lo ideal es disminuirla proporcionalmente antes de comenzar a localizarte en una zona. Luego de eso, lo que sí es posible, es la construcción de los músculos en ciertas áreas para hacer que aparezcan con más facilidad.
Para luchar contra la flacidez del área posterior del brazo, se recomienda una combinación de cardio, una dieta equilibrada para quemar la grasa y un entrenamiento de fuerza para fortalecer los músculos de los brazos, hombros y parte superior del cuerpo. Siguiendo estos pasos poco a poco irá desapareciendo está molesta grasa.
Pectorales:
Las lagartijas es uno de los ejercicios más eficaces para el desarrollo de los brazos y la parte superior del cuerpo. Para realizar este ejercicio de la forma correcta usted se debe acostar boca abajo sobre el suelo con las piernas estiradas y los pies flexionados para que los dedos de los pies se apoyen en el suelo. Coloque las manos debajo de los hombros con los codos doblados y sostenidos cerca del cuerpo.
Utilice los músculos de los brazos y parte superior del cuerpo, extienda los brazos para levantar el pecho y las caderas del suelo. Mantenga el cuerpo apretado contrayendo los músculos del abdomen y la espalda baja. Baje el cuerpo lo más cerca posible del suelo sin tocarlo doblando los codos. Estire los brazos para volver a la posición elevada. Se recomienda realizar cuatro series de 20 a 30 flexiones de brazos.
Triceps:
Los fondos de triceps son un arma eficaz para desterrar la flacidez de la axila. Siéntese justo en el borde de una silla. Coloque las manos a su lado con los dedos colgando de la silla y mantenga los pies en 90 grados. Levante la cadera estirando los brazos y desplace el peso de la silla. Doble los brazos y baje la cadera justo por debajo de la altura de la silla. Estire los brazos para volver a la posición inicial. Haga tres series de 20 a 30 repeticiones.
Adicionalmente, si acude a algún gimnasio, no olvide preguntarle a su entrenador de confianza por cualquier ejercicio de fuerza que involucre tus tríceps, estos también le ayudarán a combatir al popular “murciélago”.